Redacción
Chilpancingo, Gro., 05 de noviembre (PlanB).- La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció este lunes la intervención del Gobierno federal en Michoacán con un “plan por la paz y la justicia”. La estrategia implica el envío de fuerzas federales y la instalación de Oficinas de la Presidencia en distintos municipios, con un inicio en Uruapan.
La acción presidencial se produce después del asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, el pasado sábado. Manzo es el tercer edil ejecutado en Michoacán en el año y el séptimo durante la administración del gobernador morenista Alfredo Ramírez Bedolla. Este homicidio, junto con los asesinatos de Bernardo Bravo y Alejandro Torres Mora, líderes agrícolas, generó una crisis en la entidad.
La presidenta Sheinbaum negó que su plan implique militarizar el Estado o aplicar estrategias del pasado, como las de Felipe Calderón o Enrique Peña Nieto. No obstante, las acciones que detalló guardan similitudes con esfuerzos anteriores.
Sheinbaum anunció tres ejes principales para el plan: seguridad y justicia, desarrollo económico con justicia, y educación y cultura para la paz.
En el eje de seguridad, informó del fortalecimiento de la presencia de fuerzas federales en unidades conjuntas (Guardia Nacional, Sedena, Policía y Fiscalía estatal) para enfrentar homicidios y extorsión. Esta medida asemeja la acción emprendida por Calderón hace casi una década, cuando ordenó el envío de tropas al Estado.
También informó sobre la creación de una Oficina de la Presidencia de la República en municipios, como Uruapan. Este punto recuerda la figura del comisionado especial para la seguridad que Peña Nieto instaló en Michoacán en 2014.
Otras acciones planteadas incluyen la creación de una Fiscalía Especializada de Investigación e Inteligencia en Delitos de Alto Impacto, la instalación de Mesas de Seguridad quincenales y la creación de un sistema de alerta para los 113 presidentes municipales de Michoacán, víctimas de acoso y violencia.
El alcalde Manzo había alertado al Gobierno federal sobre la presencia del crimen organizado y solicitó apoyo. “No quiero ser un presidente municipal más de la lista de los ejecutados”, dijo en septiembre, semanas antes de su asesinato.
En su conferencia matutina del martes, la presidenta Sheinbaum condenó el uso político del asesinato del alcalde. Anunció que pronto aclarará cómo se generan las campañas de ataque en redes sociales que usan este caso. Subrayó que su Plan Michoacán no se impondrá de manera vertical ni se sostendrá con guerras, sino con «responsabilidad, justicia y respeto a la gente».
Para complementar la estrategia, anunció acciones de desarrollo económico como la creación de polos de desarrollo, la inversión en infraestructura rural y la garantía de salarios dignos a jornaleros. Añadió trece acciones en el eje de educación y cultura para la paz.