Bernardo Torres Morales
Chilpancingo, Gro., 22 de octubre (PlanB).- La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil del Estado, descartó que en la recta final de la temporada de lluvias se formen ciclones como Tormentas Tropicales o Huracanes.
El meteorólogo, de la dependencia Fermín Damián Adame, informó que Guerrero despide la temporada de lluvias, aunque en los próximos días aún hay condiciones favorables para precipitaciones.
Damián Adame destacó que la temperatura del océano frente a las costas guerrerenses ha disminuido a niveles inferiores a 28 grados centígrados, lo que reduce significativamente la posibilidad de que se formen ciclones tropicales de alta intensidad.
“Podrán registrarse lluvias, pero serán lluvias típicas de la temporada, pero no se prevé ningún huracán o tormenta destructiva como Otis o John. Y esto lo sabemos por los valores de la temperatura, tanto de la superficie como en la profundidad del océano, ubicado frente a Guerrero”, comentó.
Sin embargo, mientras se despide la temporada de huracanes, la dependencia se prepara para el inicio del periodo invernal 2025-2026, durante el cual se prevén hasta 48 frentes fríos a nivel nacional, de los cuales serán alrededor de 22 podrían afectar directamente al estado.
Damián Adame explicó que los municipios de la Montaña y la parte alta de la Costa Chica serán los más afectados por las bajas temperaturas, principalmente entre enero y febrero, meses en los que incluso podrían registrarse valores por debajo de cero grados.
El especialista recalcó que se debe dar atención principal a los niños y personas de la tercera edad, considerados los grupos más vulnerables ante el frío. Por ello, la dependencia ya comenzó la distribución de colchonetas y ropa de abrigo, además de campañas de concientización para evitar intoxicaciones por fogones o incendios ocasionados por veladoras.
Respecto a la actividad sísmica en Guerrero, dijo que se mantiene en un promedio de 14 movimientos telúricos diarios, lo que equivale a unos 5 mil al año. Aclaró que, aunque la actividad se mantiene dentro de parámetros normales, las placas tectónicas frente a las costas de Guerrero aún no han liberado energía, lo que podría dar origen a un sismo de gran magnitud, posiblemente de hasta 8 grados.
Subrayó, sin embargo, que los sismos no pueden predecirse, por lo que pidió no difundir o hacer caso de pronósticos falsos.