Jesús Saavedra
Chilpancingo, Gro., 29 de mayo (PlanB).- Como parte de las actividades de la 59 Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales 2025, la Iglesia Católica ofreció una misa en honor a los trabajadores de esa área y pidió por los que han sido asesinados, quienes estén enfermos o atraviesen una circunstancia difícil, y ayuden en su labor de comunicar a promover una cultura de la vida y no de la muerte o la violencia.
Desde hace 59 años se realizan estas jornadas y en la capital, la diócesis Chilpancingo-Chilapa ha ofrecido una misa cada año a finales de mayo y en esta ocasión la homilía la encabezó el obispo, José de Jesús González Hernández.
El obispo señaló que desde hace 59 años la Iglesia Católica pide por el bienestar y la salud de los “periodistas, los reporteros, los que trabajan en la radio, en las redes sociales, hoy a 40 días de la resurrección de Jesús lo hacemos de nueva cuenta”.
Invitó a los comunicadores “a reflexionar sobre nuestro papel, de los que nos inspira a transmitir un mensaje e información a través de los medios para acercarnos a la sociedad”.
Consideró que se debe de comunicar para saber lo que se da “a quienes sufren el flagelo de la injusticia, a quienes sufren de la inseguridad, a quienes padecen de la pobreza y la miseria”.
González Hernández aseveró que “la información debe ser un poder, a favor de la paz, a favor de la unidad, a favor del progreso, a favor de la vida”.
El prelado lamentó que haya “información que busca polarización, que haya información que busque fomentar la violencia; la comunicación debe ser transparente y capaz de establecer relaciones humanas, hay comunicaciones que están haciendo daño y en nosotros lo que queremos es dialogar y ofrecer estás reflexiones para que nuestro pueblo tenga vida digna a través de la comunicación”.
José de Jesús González indicó que piden porque a través de la labor de los comunicadores en México y en Guerrero “haya esperanza de una vida mejor, de un cambio para niños y adolescentes; hace unos días fui en misión pastoral a la Sierra y una niña me dijo que ellos tienen ganas de que vivamos, no quieren la cultura de la muerte, que tengamos vida, por eso pedimos en esta misa por los comunicadores y que se desaparezcan las guerras y divisiones en la comunidad humana”.
En la oración eclesiástica el obispo de esta diócesis pidió por los trabajadores de la comunicación que han sido asesinados, quienes estén enfermos o quienes estén pasando por una circunstancia difícil.
El obispo agregó que los comunicadores deben practicar su labor “impregnada de mansedumbre y cercanía para renovar en los hermanos la esperanza en estos tiempos tan difíciles por la violencia y la inseguridad” y los llamó a ser mediadores de paz en cualquier conflicto que exista.